Nuestros productos son 100% libres de todos los alérgenos estipulados en la normativa chilena (8 en total), e incluso de la comunidad Europea (14 en total). En el caso particular del gluten, estamos certificados y publicados en el listado de alimentos autorizados de la Fundación Convivir.

Todos nuestros productos son 100% libres de insumos de origen animal, siendo esta la razón por la que desde el 2019 contamos con la certificación VEGAN (V-Label), de amplio reconocimiento a nivel mundial, misma que se obtiene luego de un detallado estudio de los procesos, materias primas y empaques de la empresa postulante. Asimismo, nuestro maíz es libre de GMO (transgenia) y sellos negros.

En primer lugar, es importante aclarar que los hongos de nuestras tortilla de maíz no son tóxicos, por lo que no hay riesgo alguno en comerlas si se presentara esta situación. Mas allá de lo anterior, la situación que describes puede deberse a las siguientes situaciones: si compraste en supermercados, la formación de hongos antes del termino de su vida útil podría deberse a que el producto quedo almacenado al sol algunas horas previo a ser ingresado a las bodegas, en cuyo caso se produce un shock de calor al interior de las bolsas que se traduce en pequeñas gotas de agua al interior del empaque. Estas gotas, al tomar contacto con las tortillas, aceleran la formación de hongos, pudiendo presentarse la situación que describes. Lo mismo ocurre si las tortillas son colocadas en un refrigerador (en este caso, se produce un shock de frio), y luego dejadas varios días a temperatura ambiente, siendo esta la razón por la cual se indica en el reverso del envase que, en caso de guardarlas en el refrigerador, las consumas después de sacarlas del mismo. Ambas situaciones pueden ocurrir tanto en el supermercado como en tu hogar, por lo que sugerimos seguir las instrucciones de preparación y almacenamiento indicadas en el reverso de nuestros empaques.